En esta ocasión más que un relato de mi vida (aunque hace mucho no realizo uno) vengo a dejar una nota que nos servirá en nuestra cotidianidad. Creo que muchas veces nos enclaustramos en cosas que en realidad no valen la pena y hacen perder nuestro tiempo, y lo único que conseguimos son quejas, reclamos o desilusión. De tal forma, los siguientes puntos los anote de un post que vi en face y quise compartirlo con ustedes, con el fin de eliminar las impurezas del alma.
- Deja ir a personas que sólo llegan para compartir quejas, problemas, historias desastrosas, miedo y juicio de los demás. Si alguien busca un bote para echar su basura, procura que no sea en tu mente.
- Paga tus cuentas a tiempo. Al mismo tiempo cobra a quién te debe o elige dejarlo ir, si ya es imposible cobrarle.
- Cumple tus promesas. Si no has cumplido, pregúntate por qué tienes resistencia. Siempre tienes derecho a cambiar de opinión, a disculparte, a compensar, a re-negociar y a ofrecer otra alternativa hacia una promesa no cumplida; aunque no como costumbre. La forma más fácil de evitar el no cumplir con algo que no quieres hacer, es decir NO desde el principio.
- Elimina en lo posible y delega aquellas tareas que no prefieres hacer y dedica tu tiempo a hacer las que sí disfrutas.
- Date permiso para descansar si estás en un momento que lo necesitas y date permiso para actuar si estás en un momento de oportunidad.
- Tira, levanta y organiza, nada te toma más energía que un espacio desordenado y lleno de cosas del pasado que ya no necesitas.
- Da prioridad a tu salud, sin la maquinaria de tu cuerpo trabajando al máximo, no puedes hacer mucho. Tómate algunos descansos.
- Enfrenta las situaciones tóxicas que estás tolerando, desde rescatar a un amigo o a un familiar, hasta tolerar acciones negativas de una pareja o un grupo; toma la acción necesaria.
- Acepta. No es resignación, pero nada te hace perder más energía que el resistir y pelear contra una situación que no puedes cambiar.
- Perdona, deja ir una situación que te esté causando dolor, siempre puedes elegir dejar el dolor del recuerdo.
Por lo tanto, creo que darle una mejor dirección a nuestra energía genera mayor productividad y por lo mismo mayor placer por la vida. Creo que dejando a un lado lo que nos incomoda y nos hace sufrir nos permite ver más allá de la frustración, y por lo tanto nos encamina hacia una mejor persona con nosotros mismos.
Pues sí, hay que ser optimistas y librarnos de lo que nos perjudica. Saludos
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